Ayer, 19 de julio los colombianos que estamos regados por todo el mundo celebramos el día de independencia de Colombia, la fiesta se hizo en todas las ciudades del planeta donde hay colonia colombiana, desde New York al Japon, desde el polo norte hasta el polo sur, como diría Shakira.
Aquí la celebramos en el parque Jean Drapeau, que es el sitio donde tradicionalmente se hacen este tipo de fiestas en Montreal.
Hubo muchos colombianos, algunos amigos invitados de otros países y uno que otro canadience, que intentaba, con cierta rigidez en sus caderas, seguir el ritmo del vallenato, la salsa, el merengue y otros bailes latinos.
Fue una gran fiesta, hubo mucha alegría, mucho ruido, mucho baile, mucho hermandad y mucha pasión.
La presentación de los los bailes típicos de Colombia, que por cierto son muchos, mas de 40 creo yo, estuvo muy aplaudida por el público en general, pero a mi juicio y el de uno de mis amigos del pueblo, no fue mas que una burla a las tradiciones, una caricatura mal hecha, una remedo de danza; unos bailarines que se movían mas como los reguetoneros de Puerto Rico que como las negras de Cartagena, los mestizos del Valle o los criollos del llano.
Carlos quien observaba a mi lado dijo: - Si ese par de hijueputas (se refería a los bailarines que en ese momentos trataban de imitar el baile del joropo), estuvieran en mi pueblo, ya los habría matado. Yo le dije, si ese par estuvieran en nuestro pueblo, créame, ya los habrían bajado a bala de la tarima!.
Y es que se movían de un lado a otro, tratando de bailar guavina, mapalé, carranga, etc. Sin lograr atinar un solo moviemiento, un solo paso. Cualquiera que tenga tan solo un poco de formación en folklore no sabría que hacer, si salir corriendo o ponerce a llorar.
Muchos aplaudieros seguramente porque la mayoría de los colombianos que estaban allí eran de Bogota o de otras grandes ciudades, en donde no se caracterizan presisamente por conocer muy bien los bailes y danzas típicas, o porque viven hace tantos años aqui, que ya olvidaron que es lo que llaman sabor latino, así que cualquiera que se ponga un sombrero voltiao y haga un acento guajiro, podría facilmente decirles que el es el hijo legítimo de Francisco el Hombre. Claro si es que saben quien era ese tal Francisco.
PARA TERMINAR>
No es que no me alegre este tipo de reuniones y actividades,
No es que crea que no son dignos hijos de Colombia,
No es que crea que nos buenos colombianos,
Solo digo que las cultura de cada pueblo, de cada región de Colombia y del mundo
merecen ser respetadas, abordadas con reverencia, pero lo que hizo este grupo de danza que
se presentó en Montreal, esta muy lejos de lo que es el folklore colombiano.
Por favor si no le gusto mi post abstengace de dejar comentarios ofensivos.
Aquí la celebramos en el parque Jean Drapeau, que es el sitio donde tradicionalmente se hacen este tipo de fiestas en Montreal.
Hubo muchos colombianos, algunos amigos invitados de otros países y uno que otro canadience, que intentaba, con cierta rigidez en sus caderas, seguir el ritmo del vallenato, la salsa, el merengue y otros bailes latinos.
Fue una gran fiesta, hubo mucha alegría, mucho ruido, mucho baile, mucho hermandad y mucha pasión.
La presentación de los los bailes típicos de Colombia, que por cierto son muchos, mas de 40 creo yo, estuvo muy aplaudida por el público en general, pero a mi juicio y el de uno de mis amigos del pueblo, no fue mas que una burla a las tradiciones, una caricatura mal hecha, una remedo de danza; unos bailarines que se movían mas como los reguetoneros de Puerto Rico que como las negras de Cartagena, los mestizos del Valle o los criollos del llano.
Carlos quien observaba a mi lado dijo: - Si ese par de hijueputas (se refería a los bailarines que en ese momentos trataban de imitar el baile del joropo), estuvieran en mi pueblo, ya los habría matado. Yo le dije, si ese par estuvieran en nuestro pueblo, créame, ya los habrían bajado a bala de la tarima!.
Y es que se movían de un lado a otro, tratando de bailar guavina, mapalé, carranga, etc. Sin lograr atinar un solo moviemiento, un solo paso. Cualquiera que tenga tan solo un poco de formación en folklore no sabría que hacer, si salir corriendo o ponerce a llorar.
Muchos aplaudieros seguramente porque la mayoría de los colombianos que estaban allí eran de Bogota o de otras grandes ciudades, en donde no se caracterizan presisamente por conocer muy bien los bailes y danzas típicas, o porque viven hace tantos años aqui, que ya olvidaron que es lo que llaman sabor latino, así que cualquiera que se ponga un sombrero voltiao y haga un acento guajiro, podría facilmente decirles que el es el hijo legítimo de Francisco el Hombre. Claro si es que saben quien era ese tal Francisco.
PARA TERMINAR>
No es que no me alegre este tipo de reuniones y actividades,
No es que crea que no son dignos hijos de Colombia,
No es que crea que nos buenos colombianos,
Solo digo que las cultura de cada pueblo, de cada región de Colombia y del mundo
merecen ser respetadas, abordadas con reverencia, pero lo que hizo este grupo de danza que
se presentó en Montreal, esta muy lejos de lo que es el folklore colombiano.
Por favor si no le gusto mi post abstengace de dejar comentarios ofensivos.
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